Para
disminuir el uso de los generadores a combustible, el proyecto apoyó a las
comunidades con la instalación de 12 kit de paneles solares de última
generación en los lugares públicos de uso comunitario (escuelas y casa
comunales). El sistema instalado se compone de: 2 paneles solares, 1 acumulador
electroquímico de última generación, 1 inversor por comunidad y 1 regulador de
tensión. El funcionamiento es muy simple: se captan y transforman los rayos del
sol (photones) con los paneles solares a energía eléctrica continua, que se
acumula en el banco de baterías. Con el inversor se transforma la corriente
continua de 12 o 24 voltios en corriente alterna de 110 voltios, la cual se
distribuye a través de la red de cables a la(s) casa(s), donde se pueden conectar
focos fluorescentes, computadoras, radios, etc. Los paneles solares
fotovoltaicos producen energía eléctrica con corriente continua a base de la
energía solar y los módulos tienen una vida útil de 25 a 30 años.
Este
sistema permitirá satisfacer las necesidades energéticas de los lugares
públicos de las comunidades beneficiarias, con consecuente disminución del uso
del generador a combustible, de las pilas para linternas y en general de la
contaminación del medio ambiente.
Este
tipo de sistema de energía eléctrica fotovoltaica es:
•
Sustentable: porque la fuente de
energía es el sol, no contamina el ambiente, ni consume combustibles, tiene
larga vida útil (los paneles más de 25 años) y es aumentable por módulos, no
requiere mayor mantenimiento.
•
Independiente: porque sólo depende
del sol, no se necesita la conexión a la red pública eléctrica, ni combustibles.
El
trabajo de instalación de los sistemas de paneles solares en las comunidades se
realizó por parte de los técnicos calificados de la empresa Enerpro y el apoyo
de las familias. Se instalaron 12 kits de 2 paneles solares (180 vatios
totales) en 12 comunidades: Kintiuk, Achuar, Nubaimi, Yutsuntsa y Makusar en la
provincia de Pastaza; Surik Entsa, Juyukamentsa, Muruntza, Wasakentsa, Nases,
Itak, Anentak en Morona Santiago. Cabe destacar que en la zona de intervención
existen ya algunas comunidades dotadas de paneles solares, a demostración de
que es una tecnología viable en términos de condiciones ambientales (por
ejemplo, nivel de radiación).
En
cada comunidad se brindó también la capacitación necesaria para la instalación
y el correcto manejo de las herramientas y de los instrumentos instalados para
asegurar que su funcionamiento actual y futuro pueda ser mantenido
autónomamente por las comunidades. La capacitación fue dirigida a los
técnicos locales para que puedan intervenir en caso de problemas que requieran
una intervención técnica sencilla.